Evangelio

"Caminantes soñadores llenos de fe y juventud"

domingo, 20 de febrero de 2011

CUARTO DOMINGO DE SAN JOSE



El dolor:
cuando oyó la profecía de Simeón

El gozo: cuando supo que los sufrimientos de Jesús salvarían al mundo

Oración
Oh, Santo Fidelísimo que tuviste parte en los misterios de nuestra redención, glorioso San José; aunque la profecía de Simeón acerca de los sufrimientos que debian de pasar Jesús y María te causó dolor mortal, sin embargo te llenó también de alegría, anunciándote al mismo tiempo la salvación y resurrección gloriosa que de ahí se seguiría para un gran número de almas.

Por este dolor y este gozo consíguenos ser del número de los que, por los méritos de Jesús y la intercesión de la bienaventurada Virgen María, han de resucitar gloriosamente.

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